Viernes Santo Fuengirola


Almedinilla 25 de Marzo de 2016

Fuengirola vive el Viernes Santo como la jornada de procesiones más completa, con hasta seis tronos en la calle, y la más variopinta de la Semana Santa. Las hermandades del Yacente, Pasión y Fusionada volvieron a procesionar por las calles de la ciudad rememorando la muerte del Señor.

Aunque ya en la mañana se produjo el traslado del Santísimo Cristo de la Expiración y María Santísima de los Dolores desde la iglesia del Rosario a su casa hermandad, la primera de la tarde en salir fue la sección de Nuestra Madre y Señora de la Soledad desde la calle Córdoba. Cinco minutos más tarde comenzó a partir del salón de tronos el cortejo procesional de la Cofradía del Yacente, siendo el crucificado de la Caridad la primera de las tres imágenes en cruzar la fachada ilustrada de la avenida Camilo José Cela. Fusionada partió la última. La cruz guía se puso en la calle a las 20:35 horas, tras lo que el hermano Adolfo Muñoz martilleó el trono del Cristo de la Expiración para que diese sus primeros pasos. Una vez cruzado el dintel, aún con la cola del trono en el interior de la casa hermandad, el trono paró y los banderines de los Antiguos Caballeros Legionarios rodearon a la imagen mientras la banda ofrecía sones que manifestaban el luto por los caídos. Los arcos de campana de los tronos de esta corporación, además, portaban lazos con los colores de la bandera de Bruselas en señal de luto por los atentados recientemente ocurridos. La Virgen y San Juan no efectuarían su salida hasta las 20:58 horas, diez minutos más tarde que lo hiciera el Amor y Soledad del Parque, tras los toques de aviso por parte de la alcaldesa de Fuengirola, doña Ana Mula. 

 

Los encierros de la Expiración y el Yacente comenzaron a producirse casi a la par, aunque el Crucificado de Fusionada no entraría hasta las 00:50 horas,unos diecisiete minutos después que el palio del Parque. Dos procesiones muy diferentes en su estilo de puesta en escena en la calle. 

En el caso de la del Cristo Yacente, pudo contemplarse una gran sobriedad, incluso con el primer tramo de la calle Camilo José Cela con las luces totalmente apagadas. En Fusionada, en cambio, la recogida se vivía con el acompañamiento espléndido de la Banda Municipal de Música de Almedinilla con el encuentro de los dos tronos y con una placentera petalada a la dolorosa antes de entrar de nuevo a su casa hermandad.