Lluvia de trofeos en la corrida celebrada el pasado 1 de mayo en el Coliseo de Almedinilla, cuyos tendidos presentaron media entrada, a pesar de contar con David Fandila “El Fandi”.

Abrió el festejo el rejoneador Manuel Manzanares, que se enfrentó a un animal que fue perdiendo fuerza lo que perjudicó la faena del alicantino  que  se vio agravada con el desarcertado remate con los aceros que motivó el que saliera del Coliseo sin ningún trofeo, aunque el público le premió con una gran ovación.

David Fandila "El Fandi" intentó agradar al público mostrando una gran variedad de pases con el capote al recibir al primero de su lote de rodillas con larga cambiada en el tercio, verónicas, chicuelinas y media de remate. Brillante con las banderillas y entregado con la muleta por ambos pitones rubricó su actuación con una estocada tendida que levantó al público de sus asientos hasta que la presidencia concedió la segunda oreja. Con el segundo toro de su lote volvió a tirar de su amplia variedad de pases con el capote, su maestría con las banderillas al que puso cuatro pares y una larga faena con la muleta con tandas cortas y variedad de pases acompasados con el pasodoble de la Banda Municipal de Música haciendo vibrar al graderío que pidó enfervorecido los máximos trofeos, tras una gran estocada, y que la presidencia concedió ante la insistencia del público.

Joaquín Galdós también quiso agradar y ante su primero tan solo pudo anotar algunas verónicas de gran calidad por el pitón derecho y varios naturales sueltos de buen calado. Ante las escasas fuerzas del animal, el peruano tuvo que buscar las cercanías elevando la tensión y emoción en el público que pidió con insistencia las dos orejas al rematarlo con una magnífica estocada. El quinto que cerraba plaza se lesionó en los primeros lances. En su lugar se lidió un sobrero de la misma ganadería que el limeño lo recibió con varias verónicas. En el tercio de varas no dio muchas esperanzas, pero el joven torero puso mucho empeño buscando la transición en los naturales y metiéndose entre los pitones, dando emoción a su faena que remató con la estocada de la tarde premiándole el público y presidencia con las dos orejas y rabo.

Por fin se ha hecho realidad la presencia del Fandi en el Coliseo almedinillense, cumpliéndose los deseos de la afición, pues hace 21 años que toreó en Almedinilla con jóvenes promesas de la vecina localidad de Priego, siendo una lástima que parte de esa afición no haya acudido a la plaza.