Gran Final del XXIV Ciclo de Novilladas Escuelas Taurinas "Pedro Romero"


Almedinilla a 28 de Julio de 2018

El Coliseo de Almedinilla no tuvo triunfador del festejo celebrado el día 28 de Julio por la mala actuación de los finalistas con la espada.

Plaza: Coliseo de Almedinilla. Lleno Hasta la bandera.

Ganadería: Novillos de Lola Domeqc “El Torero”, con buena presentación y casta.

Paseillo:

Este año nuestra banda ha decidido interpretar para el Paseillo "Pan y Toros" de Francisco Asenjo, un pasacalle de la Zarzuela el cual se está interpretando en muchas de las Plazas de toros últimamente.

Jesús Rivero: Ovación, tras 3 avisos; y una oreja, tras 2 avisos.

Nuestra banda tocó para él Morenito de Valencia de Vicente Portolés y "En er Mundo" de Juan Quintero y Jesús Fernández.

Alejandro Cano: Oreja, tras 1 aviso; y  ovación, tras 2 avisos y petición.

Interpretamos Juan Fernández "Carnicerito" de Martín Alonso y El Tío Canillitas de Ricardo Dorado.

Christian Parejo: Silencio, tras 3 avisos; y una oreja, tras 2 avisos.

En esta ocasión nuestra banda le dedicó al mas joven de los novilleros ¡¡Churumbelerías!! de Emilio Cebrian y el pasodoble Paco Mendes de Jaime Texidor.

Incidencias: Tarde de calor. Vuelta al ruedo del cuarto novillo. El jurado deja desierto el primer premio, mientra que el segundo es compartido por Jesús Rivero y Alejando Cano.

El vigésimo cuarto certamen de novilladas sin caballos, organizado por la Asociación Andaluza de Escuelas Taurinas “Pedro Romero” ha tenido una final agridulce para novilleros, organización y aficionados que se desplazaron al Coliseo de Almedinilla para ver la gran final en la que se habían hecho acreedores los novilleros, Jesús Rivero, de la Escuela Taurina de San Fernando; Alejandro Cano, de la Escuela de La Línea; y Christian Parejo, de la Escuela de Chiclana, 

Jesús Rivero tuvo una actuación brillante tanto con el capote como con la muleta, pero falló con la espada en la suerte suprema que comenzó pinchando, estocada, pinchazos, estocada y descabellos. En el transcurso del tercio recibió tres avisos y una prolongada ovación del público. En su segundo novillo, gran faena con la mano izquierda con un dominio absoluto y remate complicado con estocadas, pinchazos, dos avisos y oreja ante la insistencia del público. Al toro se le dio la vuelta al ruedo por su nobleza y casta.

Alejandro Cano mostró en sus dos enemigos que domina el manejo de capote y muleta y que es capaz de sacar buenos pases y dominar la situación en todo momento, pero tiene que aprender en la suerte suprema, a pesar de las dos estocadas con las que se deshizo de su primero, tras un aviso, que le valió una oreja, evidenciándose la falta de manejo del descabello que le llevó a recibir dos avisos y tener una petición de oreja por un sector del público.

Christian Parejo, el más joven de la terna, tuvo gestos de torería tanto con el papote como con la muleta, pero cayó en el mismo error que sus compañeros de terna en el momento culmen con la espada tanto en su primero con media estocada, varios descabellos y tres avisos, como con el segundo que lo enganchó en varias ocasiones y lo remató con media estocada, pinchado, estocada y varios descabellos lo que le valió dos avisos y una oreja.

Esta mala actuación en la suerte suprema hizo que el jurado dejara desierto el premio al Triunfador del Ciclo, por "el mal uso de las espadas", y concediendo el segundo puesto, tras un empate a puntos, a Alejandro Cano y Jesús Rivero.


Noticia modificada de lafuentezuela.com